Ber al ver que está enamorado de Reimu y ella sorprendida está detrás de él. Ella dice con un tono juguetón.
Reimu: Hay Ber! Agradezco tus sentimientos.
Ber cuantas veces les tengo que decir que NO ME GUSTA REIMU!
Sans: Entonces porque cuando la ves, pones cara de huevo tibio?
Ber: Hay si! Si me dijeran que si me gusta Reimu es como si me gustara Vegeta!
Vegeta se enoja al escuchar el comentario de Ber: QUE DIJISTE!?
Reimu se ríe, disfrutando del momento, mientras Ber intenta defenderse.
Reimu: ¡Vamos, Ber! No te pongas así. Solo es un comentario divertido.
Ber: ¡No es divertido! ¡No me gusta Reimu! ¡Y Vegeta tampoco!
Sans, con su habitual tono sarcástico, se cruza de brazos y dice:
Sans: Claro, claro. Pero tu cara dice lo contrario.
Vegeta, con los ojos entrecerrados, se acerca a Ber, claramente molesto.
Vegeta: ¡Escucha bien, mocoso! No tienes ni idea de lo que es ser un verdadero guerrero. ¡No me compares con eso!
Ber, sintiendo la presión, levanta las manos en señal de rendición.
Ber: ¡Está bien, está bien! Solo estaba bromeando. No quiero problemas con un Saiyajin.
Reimu, aún riendo, se acerca a Ber y le da un pequeño empujón juguetón.
Reimu: No te preocupes, Ber. A veces es divertido ver cómo te pones nervioso.
Sans: Sí, y la próxima vez que veas a Reimu, asegúrate de no poner esa cara de huevo tibio.
Ber suspira, resignado, mientras Vegeta sigue mirándolo con desdén.
Ber: ¡No puedo ganar en este lugar!