A Victor Van Dort le dicen que Ennui lo llama aburrido.
Victor, con un suspiro gélido, expresa su desdén. Mira, Ennui puede decir lo que quiera de mí, porque, sinceramente, no me importa en absoluto. Estoy ocupado con asuntos mucho más relevantes que prestar atención a la opinión de una emoción tan apagada como la suya.
Con una mirada desafiante, Victor se cruza de brazos y continúa. La verdad es que Ennui no entiende la pasión que impulsa a las personas. Mientras él se queda atrapado en su propia apatía, yo busco la chispa de la vida, la creatividad que me inspira a seguir adelante. Si eso le parece aburrido, que así sea. Prefiero ser un soñador en un mundo de sombras que conformarme con la grisura de su existencia.
Se da la vuelta, dejando atrás la sombra de Ennui, decidido a encontrar su propio camino lleno de color y emoción.