Laura al ver que Terry no para de insistir con su propuesta navideña responde con una sonrisa sarcástica.
Laura: Iré a tu mugrosa fiesta solo para que me dejes en paz. Luigi y Daisy, Ósea mis padres, también recibirán la invitación, pero nosotros no vamos a reírnos o a sonreír solo porque estemos en tu fiestecita.
Terry, emocionado por la respuesta de Laura, no puede evitar sonreír aún más.
Terry: ¡Genial! ¡Eso es todo lo que necesitaba escuchar! Y no te preocupes, no espero que todos se rían y sonrían todo el tiempo. Solo quiero que se diviertan un poco. Además, tengo algunas sorpresas preparadas que seguro les van a gustar.
Laura, cruzando los brazos y levantando una ceja, responde con un tono burlón.
Laura: ¿Sorpresas? ¿Como qué? ¿Un concurso de quién puede aguantar más tiempo sin reírse? Porque eso sí que suena emocionante.
Terry, sin desanimarse, responde con entusiasmo.
Terry: ¡Exactamente! Pero también habrá juegos, comida deliciosa y, por supuesto, la mejor música navideña. ¡Vamos, Laura! Solo quiero que todos pasemos un buen rato, incluso si eso significa que tú y tus padres no van a sonreír.
Laura, intentando mantener su actitud sarcástica, no puede evitar que una pequeña sonrisa se asome en su rostro.
Laura: Está bien, Terry. Pero no esperes que me convierta en la reina de la fiesta. Solo estaré allí para asegurarme de que no te vuelvas loco con tus "sorpresas".
Terry, satisfecho con la respuesta, asiente con entusiasmo.
Terry: ¡Eso es todo lo que pido! ¡Nos vemos en la fiesta, entonces!