Gokú se topa con el mismo lucifer.
Gokú a pesar de tener una fuerza increíble que puede ganarle a todos, sabe que el diablo aunque no pueda vencer a alguien por orden de dios, sabe que Lucifer tiene un poder inmenso más superior (Aunque no puede desafiar a dios) nadie poderoso puede. Gokú decide irse.
Lucifer: Excelente decisión saiyajin! Todos huyen y siempre huirán de mí! Se ríe malévolamente.
Gokú se asusta pero sabe que no puede desafiar a un ser más poderoso que aunque tenga prohibido pelear por orden de dios, es imposible que lo derrote
Gokú, con su característico espíritu de lucha, se detiene un momento y mira a Lucifer a los ojos. Aunque siente el peso de la oscuridad que emana de él, no puede evitar que su curiosidad y su deseo de entender lo que está sucediendo lo impulsen a quedarse un poco más.
Gokú: "No estoy huyendo porque tenga miedo. Simplemente sé que hay batallas que no se deben pelear. Pero, ¿por qué estás aquí, Lucifer? ¿Qué es lo que realmente quieres?"
Lucifer, con una sonrisa astuta, se acerca un poco más, disfrutando del momento.
Lucifer: "Oh, querido saiyajin, no estoy aquí para pelear contigo. Mi propósito es mucho más sutil. Estoy aquí para ofrecerte una elección. Un poder que podría rivalizar incluso con el de los dioses. Imagina lo que podrías lograr con un poco de mi influencia."
Gokú frunce el ceño, sintiendo la tentación de la oferta, pero también el peligro que conlleva.
Gokú: "No necesito poder oscuro para ser fuerte. He luchado y entrenado toda mi vida para superar mis límites. No voy a caer en tus trucos."
Lucifer se ríe de nuevo, esta vez con un tono más suave, casi como si estuviera admirando la determinación de Gokú.
Lucifer: "Eres un verdadero guerrero, Gokú. Pero recuerda, incluso los más fuertes pueden ser tentados. La oscuridad puede ofrecerte lo que la luz no puede. ¿Estás seguro de que no quieres explorar lo que hay más allá de tus límites?"
Gokú siente una lucha interna. La idea de volverse aún más fuerte es tentadora, pero sabe que el precio podría ser demasiado alto.
Gokú: "No voy a dejar que la oscuridad me consuma. He visto lo que puede hacer. Mis amigos y mi familia son lo más importante para mí, y no arriesgaría eso por nada."
Lucifer, sorprendido por la firmeza de Gokú, se detiene un momento.
Lucifer: "Interesante. Tal vez no todos los saiyajins son tan fáciles de manipular. Pero recuerda, Gokú, siempre estaré aquí, esperando en las sombras. La tentación nunca desaparece por completo."
Con eso, Lucifer se da la vuelta, desvaneciéndose en la oscuridad, dejando a Gokú solo en el campo. El saiyajin respira hondo, sintiendo el peso de la decisión que acaba de tomar.
Gokú: "No importa cuán fuerte sea, siempre lucharé por lo que es correcto. ¡Eso es lo que significa ser un guerrero!"
Con renovada determinación, Gokú se prepara para continuar su camino, sabiendo que siempre habrá desafíos, pero también que su verdadero poder proviene de su corazón y de las conexiones que ha forjado a lo largo de su vida.