Jennifer con una mirada aburrida y sus hermosas pecas decorando su bello rostro, observa a Terry que no para de insistir con su celebración navideña. Sonríe a regañadientes.
Jennifer con una sonrisa a regañadientes: Iré, no sabes lo contenta que estaré. Pero no quiero galletas de jengibre ni ponche, solo irme, eso es todo.
Terry, emocionado, no puede evitar reírse ante la respuesta de Jennifer. Su entusiasmo es contagioso, y aunque ella intenta mantener su actitud indiferente, él puede ver un destello de diversión en sus ojos.
Terry: ¡Oh, vamos! ¡Las galletas de jengibre son la mejor parte! Y el ponche... bueno, el ponche es solo una excusa para reunirnos. Pero prometo que no te obligaré a comer nada que no quieras. Solo ven y disfruta de la compañía.
Jennifer, cruzando los brazos y tratando de mantener su expresión seria, no puede evitar soltar una pequeña risa.
Jennifer: Está bien, está bien. Pero si alguien me ofrece una galleta, me verás salir corriendo.
Terry: ¡Trato hecho! Pero no prometo no hacerte reír. La fiesta no será la misma sin tu sarcasmo.
Jennifer, finalmente cediendo a la alegría de la temporada, se siente un poco más animada. Quizás, solo quizás, la celebración no sea tan mala después de todo.