Ennui Siniester se topa con Alastor.
Alastor: No te apetecería un lindo bocadillo aquí en el hotel hazbin? Digo, así tu aburrimiento se acabaría rápido.
Ennui Siniester con la ceja alzada: Da igual, todo es aburrido de todas formas. Pero todo por una "buena" comida, pero no prometo nada.
Alastor, con su característica sonrisa siniestra, se inclina un poco hacia Ennui, sus ojos brillando con un destello de diversión.
Alastor: ¡Oh, pero eso es lo que hace la vida tan interesante! La comida puede ser un deleite, o una experiencia... inolvidable. ¿Quién sabe? Tal vez encuentres algo que despierte tu interés, aunque sea por un breve momento.
Ennui Siniester cruza los brazos, mirando a Alastor con desdén.
Ennui Siniester: ¿Y qué es lo que tienes en mente? ¿Un platillo que me haga sentir algo más que esta eterna apatía?
Alastor se ríe, un sonido melodioso y perturbador al mismo tiempo.
Alastor: ¡Ah, pero eso es el truco! No se trata solo de la comida, sino de la compañía. En este hotel, cada bocado puede ser una aventura, y cada conversación, un giro inesperado. ¿Te atreves a descubrirlo?
Ennui Siniester suspira, pero una pequeña chispa de curiosidad se asoma en su mirada.
Ennui Siniester: Está bien, Alastor. Te seguiré el juego. Pero si me decepcionas, no me responsabilices por lo que pueda suceder.
Alastor se frota las manos, emocionado.
Alastor: ¡Perfecto! Vamos, entonces. Te prometo que no te arrepentirás... al menos no de inmediato.