Shadow trata de controlar sus emociones porque Terry no para de insistir con su fiesta navideña, luego, dice.
Shadow: YA SUFICIENTE! Bien, iré a tu fiesta pero deja de insistir que no soy sordo.
Terry, sorprendido por la reacción de Shadow, se detiene un momento y sonríe.
Terry: ¡Genial! No te preocupes, no volveré a insistir. Solo quería que te divirtieras un poco.
Shadow, cruzando los brazos, intenta mantener su expresión seria, pero una pequeña sonrisa se asoma en su rostro.
Shadow: No estoy seguro de qué tan divertido puede ser, pero... supongo que no tengo nada mejor que hacer.
Terry: ¡Eso es el espíritu! Habrá comida, música y, por supuesto, ¡un montón de sorpresas!
Shadow: Sorpréndeme, entonces. Pero no esperes que me ponga un gorro de reno o algo así.
Terry ríe, aliviado de que finalmente haya aceptado.
Terry: No prometo nada, pero haré lo posible para que sea una fiesta memorable. ¡Nos vemos allí!
Shadow asiente, sintiendo una mezcla de frustración y curiosidad. Quizás, solo quizás, la fiesta no sea tan mala después de todo.