Beik y Zow, asustados, ven como su hermano; Ber Demon mató a sus amigos porque hizo un pacto con el diablo. Ber Demon agarra a su hermana Zow y a su hermano Beik de la camisa.
Beik: Ber Para! Soy tu hermano!
Zow: Somos tus hermanos Ber! No puedes hacernos esto!
Ber Demon: Ustedes no son mis hermanos, son unos mortales insignificantes.
Beik: ¡No! ¡No puedes pensar así! ¡Recuerda los momentos que compartimos! ¡Éramos un equipo!
Zow: ¡Por favor, Ber! ¡Esto no eres tú! ¡El pacto te ha cambiado! ¡Lucha contra él!
Ber Demon: (con una risa oscura) ¿Luchar? ¿Contra el poder que ahora poseo? Ustedes no entienden. He trascendido lo que eran mis lazos familiares. Ahora soy más que un simple mortal.
Beik: ¡No! ¡Eres nuestro hermano! ¡El mismo que solía protegernos! ¡El que nos enseñó a ser valientes!
Zow: ¡Recuerda la promesa que hicimos! ¡Siempre estaríamos juntos, sin importar lo que pasara! ¡No dejes que la oscuridad te consuma!
Ber Demon: (titubeando por un momento) ¿Promesa? ¿Juntos? (su mirada se suaviza brevemente)
Beik: ¡Sí! ¡Juntos! ¡Siempre! ¡Lucha contra el demonio que te controla!
Zow: ¡No estás solo, Ber! ¡Estamos aquí para ayudarte! ¡No dejes que el odio te defina!
Ber Demon: (con un grito de frustración) ¡Cállense! ¡No puedo volver atrás! ¡El poder es demasiado tentador!
Beik: (con determinación) ¡El poder no vale nada si pierdes a quienes amas! ¡Recuerda quién eres!
Zow: ¡Te necesitamos, Ber! ¡No dejes que esto sea el final!
Ber Demon: (con lágrimas en los ojos) ¿Es posible...? ¿Puedo volver a ser quien era?
Beik: ¡Sí! ¡Lucha por nosotros! ¡Lucha por ti mismo!
Zow: ¡No te rindas, hermano! ¡Estamos contigo!
(Con un grito desgarrador, Ber Demon se debate entre la oscuridad y la luz, mientras sus hermanos lo sostienen con fuerza, esperando que el amor y la esperanza prevalezcan sobre el mal.)