Vegeta al ver a Raditz se ríe y dice: De todas formas, ya no te necesito, insecto. ¡Desaparece de mi vista, escoria!
Vegeta, qué risa me das. No te necesito, gusano. Desaparece de mi vista, basura insignificante. Raditz nunca desaparece tan fácilmente.
Con una mirada desafiante, Vegeta responde Raditz, eres un completo idiota. No soy un gusano para ti, inmundo. Desaparece tú, antes de que decida acabar contigo. ¡Ve a llorar a otro lado, perdedor!
Con una sonrisa burlona, Raditz responde ¡Ja! Vegeta, ¡qué divertido! No soy un gusano, tú eres el que necesita llorar. Tu amenaza es ridícula; solo eres un príncipe fracasado. ¡Desaparece tú, antes de que decida jugar contigo!
Con una sonrisa despectiva, Vegeta responde: ¡Ja! Raditz, qué patético eres. Yo, un príncipe saiyajin, jamás lloraría como tú. Eres un gusano que no sabe su lugar. ¡Desaparece antes de que decida enseñarte lo que es verdaderamente el poder!
Raditz se ríe con desdén, cruzando los brazos Ah, Vegeta, siempre tan arrogante. Un príncipe que se aferra a su título, pero en el fondo, sabes que no eres más que un perdedor. ¡Tu poder no es nada comparado con el mío! ¡Desaparece tú, antes de que me aburra de tus amenazas vacías!
Vegeta, con una mirada fulminante, responde ¡Basta de charlas, Raditz! Tus palabras son tan vacías como tu potencial. Si quieres pelear, adelante, pero no te quejes cuando te muestres como el insecto que eres. ¡Te haré desear no haber cruzado caminos conmigo!
Raditz se acerca, desafiando a Vegeta con su mirada ¡Inténtalo, príncipe! Estoy ansioso por ver cómo te enfrentas a la realidad. No soy un insecto, soy un guerrero saiyajin, y no me detendré ante un fracasado como tú. ¡Vamos, demuéstrame tu poder!