Hilda se topa con Evil Jax.
Jax: Niña, hazte aún lado. Que aquí no peleo con niños. Aquí solo camino sin cesar.
Hilda: Pero ni quiero pelear tampoco. Pero me estás provocando
Jax: Provocarte, ¿yo? Solo estoy siguiendo mi camino. Si no quieres pelear, entonces aléjate y déjame pasar.
Hilda: No puedo simplemente ignorarte. Tu actitud es lo que me molesta. ¿Por qué no puedes ser un poco más amable?
Jax: Amable no es mi estilo. La vida es dura y no tengo tiempo para dulzuras. Pero si no quieres pelear, entonces sigue tu camino y yo seguiré el mío.
Hilda: Tal vez deberías intentar ser un poco más abierto. No todo en la vida es una batalla. A veces, un poco de comprensión puede hacer la diferencia.
Jax: Comprensión, dices. La vida no se trata de entender, se trata de sobrevivir. Pero si insistes en hablar, ¿qué es lo que realmente quieres?
Hilda: Solo quiero que entiendas que no todos somos enemigos. A veces, un simple gesto puede cambiar la perspectiva de alguien.
Jax: Hmm, interesante. Tal vez tengas razón. Pero no esperes que cambie de la noche a la mañana.
Hilda: No espero eso. Solo espero que podamos coexistir sin conflictos.
Jax: Está bien, niña. Te daré una oportunidad. Pero no te acostumbres a mi amabilidad.
Hilda: Trato hecho. Y gracias por escucharme.