Zeno Sama se topa con Evil Cody.
Cody: El rey de todo? Hay muchos seres mas poderosos. Eres solo un inútil que cree que matando con tu mano puedes. Todo.
Zeno Sama: No soy un inútil si, yo puedo hacerlo al menos que eso quieras.
Cody: al ver que extiende su mano. Que vas a hacer? matarme? Se encoge de hombros. Adelante, hazlo. No voy a esquivarlo ni nada. Pero no lograrás nada con hacer eso.
El fantasma de Obama aparece y dice con un tono de preocupación.
Obama: Pero que haces Cody!? Zeno te puede matar de verdad!
Cody: Y qué? Que lo haga, no tengo miedo de morir, yo siempre vuelvo
Zeno Sama, con su mirada serena pero decidida, observa a Cody mientras el ambiente se carga de tensión. La presencia del fantasma de Obama añade un toque surrealista a la situación, pero Zeno no se deja distraer.
Zeno Sama: No se trata solo de la muerte, Cody. Se trata de las consecuencias de tus acciones. No puedes simplemente desafiar a quien no comprendes.
Cody, con una sonrisa desafiante, se cruza de brazos.
Cody: ¿Consecuencias? He enfrentado a seres más poderosos que tú y siempre he encontrado la manera de regresar. La muerte es solo un paso más en mi camino.
Obama, con una expresión de preocupación, intenta intervenir.
Obama: Cody, por favor, piénsalo bien. No subestimes el poder de Zeno. No es solo un rey, es un ser que puede borrar la existencia misma.
Zeno Sama, sin perder la calma, responde.
Zeno Sama: No busco borrar tu existencia, Cody. Pero si decides seguir este camino, no tendré otra opción. La vida y la muerte son solo dos caras de la misma moneda, y yo tengo el poder de decidir cuál es el resultado.
Cody se ríe, desafiando la gravedad de la situación.
Cody: Entonces, ¿qué esperas? ¡Hazlo! Estoy listo para enfrentar lo que venga. No soy un cobarde.
Zeno Sama, con un leve suspiro, extiende su mano aún más.
Zeno Sama: No es valentía lo que veo en ti, sino una falta de comprensión. La verdadera fuerza no radica en desafiar a los poderosos, sino en saber cuándo es el momento de luchar y cuándo es el momento de retirarse.
Cody, sintiendo la presión de las palabras de Zeno, comienza a dudar.
Cody: ¿Retirarme? ¿Y dejar que me pisoteen? No, eso no es lo mío.
Obama, viendo la lucha interna de Cody, intenta apelar a su sentido común.
Obama: Cody, no se trata de rendirse. Se trata de elegir tus batallas. A veces, la sabiduría está en saber cuándo no luchar.
Zeno Sama, con una mirada penetrante, concluye.
Zeno Sama: La elección es tuya, Cody. Pero recuerda, cada acción tiene su repercusión. Y yo no dudaré en actuar si es necesario.
Cody, sintiendo el peso de la decisión, se queda en silencio, contemplando las palabras de Zeno y la preocupación de Obama. La tensión en el aire es palpable, y el destino de ambos pende de un hilo.