Rey Aroon y Padre Tiempo al ver que las chicas super poderosas se meten cruzan los brazos.
Rey Aroon: Porque se tienen que meter en donde no las llaman?
Padre Tiempo: Por dios, es que ellas siempre se meten en todo! Nosotros si peleamos con enemigos, se meten.
Otros personajes de diferentes universos intervienen y apoyan a Padre Tiempo y a Rey Aroon.
Exactamente, todos les hemos dicho que no necesitamos su ayuda, pero son unas reacias, no entienden. No están hechas para esto.
Ya estamos hartos en serio!
Rey Aroon: (frustrado) ¡Es que no lo entienden! Siempre tienen que estar en medio de todo, como si fueran las heroínas de cada historia.
Padre Tiempo: (asintiendo) Exacto. Ya hemos lidiado con nuestros propios enemigos, y ellas siempre aparecen en el momento menos indicado. ¡Es como si no pudieran resistirse a la acción!
Personaje 1 (de un universo de superhéroes): ¡Yo también lo he notado! Siempre quieren ser las protagonistas, pero a veces no comprenden el verdadero peligro. ¡Dejen que los que saben lo hagan!
Personaje 2 (de un universo de fantasía): ¡Totalmente de acuerdo! En mi mundo, hay momentos en que la intervención de los héroes no es necesaria. A veces, lo mejor es dejar que las cosas sigan su curso.
Personaje 3 (de un universo de ciencia ficción): Y no solo eso, ¡sino que a menudo complican las cosas! Sus buenas intenciones a veces generan más caos. Necesitamos un poco de orden, no más desastres.
Rey Aroon: (mirando a los demás) ¿Ven? No somos los únicos que lo pensamos. Ellas tienen que entender que no siempre son necesarias.
Padre Tiempo: (suspirando) Y lo peor es que, cuando intentamos explicarles, se ofenden. ¡Es frustrante!
Personaje 4 (de un universo de comedia): ¡Y no hablemos de sus discursos sobre la amistad y el trabajo en equipo! A veces, solo necesitamos un poco de silencio y estrategia.
Rey Aroon: (con determinación) Entonces, ¿qué hacemos? ¿Cómo les hacemos entender que a veces es mejor dejar que los demás se encarguen?
Padre Tiempo: (pensativo) Tal vez deberíamos reunirnos y tener una conversación seria. Pero, ¿quién se atrevería a decírselo?
Personaje 1: ¡Yo me ofrezco! Pero necesitaré un plan. No quiero que se sientan atacadas, solo que comprendan que hay momentos para intervenir y momentos para observar.
Rey Aroon: (asintiendo) Eso suena bien. Necesitamos que entiendan que no es un ataque personal, sino una cuestión de estrategia.
Padre Tiempo: (con una sonrisa) Entonces, ¡manos a la obra! Tal vez, solo tal vez, podamos encontrar un equilibrio en este caos.