Vaggie se topa con Evil Cody.
Vaggie: Señor Jones, por que viene aquí a Hazbin Hotel? A fisgonear el hotel?
Evil Cody la interrumpe y dice.
Cody: No, yo ya no soy un detective de misterios querida, ahora como el caos se apoderado de mí, solo quiero ver como lloras, o gimes, O como tú quieras. Solo que no es nada suave
Vaggie frunce el ceño, sintiendo cómo la tensión en el aire se intensifica.
Vaggie: ¿Y qué te hace pensar que voy a dejar que te salgas con la tuya? Este lugar no es un parque de diversiones para tus juegos retorcidos.
Evil Cody se ríe, una risa fría y burlona que resuena en las paredes del hotel.
Cody: Oh, querida, no subestimes el poder del caos. La desesperación tiene su propia belleza, y estoy aquí para disfrutarla.
Vaggie da un paso adelante, su determinación brillando en sus ojos.
Vaggie: No me importa lo que hayas hecho en el pasado. Aquí, en el Hazbin Hotel, luchamos por redimirnos, no por destruir.
Cody se acerca, su sonrisa se vuelve más siniestra.
Cody: ¿Redención? Eso suena aburrido. ¿No prefieres un poco de diversión? Puedo ofrecerte un espectáculo que nunca olvidarás.
Vaggie se cruza de brazos, desafiándolo.
Vaggie: Si lo que quieres es un espectáculo, entonces tendrás que enfrentarte a mí primero. No dejaré que arruines lo que estamos tratando de construir aquí.
Cody se detiene, sorprendido por su valentía.
Cody: Interesante. Tal vez esto no sea tan aburrido después de todo. ¿Listo para jugar, Vaggie?
Vaggie asiente, lista para enfrentarse a la oscuridad que representa Cody.
Vaggie: Estoy lista. Pero recuerda, el caos no siempre gana.
Y así, la confrontación entre la luz y la oscuridad comienza, con el destino del Hazbin Hotel en juego.