Luigi al entrar a Hazbin Hotel, comienza a llamar el nombre de su hermano.
Luigi: Mario?
Luego viene todo el Hazbin Hotel.
Alastor: Miren quien está aquí! El hermano del fontanero rojo!
Luigi se sobresalta al ver no solo a Alastor, si no a todo el Hazbin Hotel.
Luigi: Creo que me equivoqué de Mansión.
Charlie: Hola Luigi.
Luigi: Mario no está aquí cierto?
Alastor: Oh, no, no, no. Tu hermano no está aquí, pero ¡qué alegría tenerte en nuestro pequeño hotel!
Luigi: ¿Pequeño hotel? Esto parece más una pesadilla que un lugar para descansar.
Charlie: No te preocupes, Luigi. Aquí en el Hazbin Hotel estamos trabajando para redimir a las almas perdidas. ¡Quizás puedas ayudar!
Luigi: ¿Redimir? ¿Y cómo se supone que voy a hacer eso? Solo soy un fontanero.
Alastor: ¡Ah, pero eso es lo que lo hace tan interesante! ¡Imagina las posibilidades! Un fontanero en el infierno, ¡qué divertido!
Luigi: No sé si esto es divertido... ¿Dónde está Mario?
Vaggie: No te preocupes, Luigi. Si te quedas un rato, tal vez podamos ayudarte a encontrarlo.
Luigi: ¿Y qué hay de esos demonios? ¿No me van a comer o algo así?
Angel Dust: ¡Oh, cariño! No te preocupes por nosotros. Solo queremos un poco de diversión.
Luigi: No estoy aquí para divertirme, estoy aquí para encontrar a mi hermano.
Charlie: Entonces, ¿qué tal si te ayudamos a buscarlo? ¡Podríamos hacer un equipo!
Luigi: Un equipo... Bueno, supongo que no tengo otra opción. Pero si veo a algún demonio raro, ¡mejor que se aleje de mí!
Alastor: ¡Eso es el espíritu! ¡Vamos a buscar a Mario! ¡La aventura comienza!
Luigi: Espero que no sea una aventura demasiado loca...