Evil Casandra se topa con Michael Myers.
Casandra con una sonrisa siniestra: Michael, te he notado muy... Indiferente...
Michael Myers escribe en su libreta con su expresión fría: Digamos que... No tengo planes ni interés de algo.
Casandra dice: Y sí provocamos algo tú y yo? Si quieres puedo darte un premio.
Michael levanta la mirada de su libreta, sus ojos oscuros reflejan una mezcla de curiosidad y desdén.
Michael Myers: ¿Premio? No estoy interesado en juegos.
Casandra se acerca un poco más, su sonrisa se ensancha mientras juega con un mechón de su cabello.
Casandra: Oh, pero este no es un juego cualquiera. Imagina lo que podríamos hacer juntos. Dos fuerzas del caos, desatando el terror.
Michael, sin inmutarse, vuelve a escribir en su libreta: ¿Y qué ganaría yo con eso?
Casandra se ríe suavemente, como si la idea le pareciera divertida.
Casandra: La emoción, la adrenalina... y quizás un poco de diversión. ¿No te gustaría ver cómo el mundo reacciona ante nuestra unión?
Michael cierra su libreta lentamente, su mirada fija en ella.
Michael Myers: No necesito compañía para causar terror.
Casandra se encoge de hombros, sin perder su actitud desafiante.
Casandra: Tal vez, pero juntos podríamos ser imbatibles. Piensa en la fama, en la leyenda que podríamos crear.
Michael se queda en silencio, considerando sus palabras.
Michael Myers: La leyenda no me interesa. Solo el resultado.
Casandra se inclina hacia él, su voz se vuelve un susurro seductor.
Casandra: Entonces, ¿qué tal si comenzamos con algo pequeño? Un simple acto de caos, solo para ver cómo se siente.
Michael finalmente muestra un leve atisbo de interés, aunque su expresión sigue siendo fría.
Michael Myers: Un acto. Solo uno.
Casandra sonríe, satisfecha.
Casandra: Perfecto. Vamos a hacer que el mundo se estremezca.