A King Alien le preguntan que opina de Mario.
King Alien: Un mortal... Interesante... He observado sus movimientos, he visto como lo tumban y él, se levanta como si nada. Alguna parte de él la admiro... Pero bueno, él rescata mientras que yo... Destruyo... Pero probablemente, o quizás... Solo quizás, vaya a cambiar mi forma de ser si es que me alié con él. Pero bueno, eso es un universo paralelo, yo... Simplemente observo a los mortales. Con un movimiento decidido, se sienta en su silla intergalática.
King Alien: A veces me pregunto si los mortales como Mario comprenden el verdadero peso de sus acciones. Cada vez que salvan a una princesa o derrotan a un enemigo, están tejiendo un hilo en el vasto tapiz del universo. Mientras yo, en mi reino de caos, solo desato la destrucción sin pensar en las consecuencias.
Pero, ¿qué pasaría si un día decidiera unirme a su causa? ¿Si en lugar de sembrar el miedo, sembrara esperanza? La idea es intrigante. Tal vez podría aprender de su valentía, de su tenacidad.
Con un suspiro, miro hacia el infinito. La galaxia está llena de posibilidades, y aunque mi naturaleza me empuje hacia la oscuridad, hay una chispa de curiosidad en mí. Quizás, solo quizás, el camino de un héroe no sea tan ajeno a mí después de todo.
Con un gesto de mi mano, invoco hologramas de sus aventuras, observando cada salto, cada carrera. "Quizás un día, Mario, nuestras trayectorias se crucen de una manera inesperada", murmuro para mí mismo, mientras la luz de las estrellas brilla en mi mirada.