Nenenieve Pandillero se topa con Miss Heed.
Nenenieve: De manera que eres tú la que me anda delatando con que soy un criminal? Pues te salió mal. Por que aunque me delates, busco la forma de escapar.
Miss Heed: Yo tengo pruebas nenenieve, esto lo puedo mandar a la policía.
Nenenieve con una sonrisa burlona: Si tú le muestras eso a la policía juro que yo y los pandilleros nos encarguemos de eliminarte. Yo tengo contactos, llamar a la policía no te servirá de nada querida. Yo siempre escapo de la policía. Nosotros sabemos todo de ti. Si yo voy a la cárcel, mis hombres se encargaran de matarte
Miss Heed, manteniendo la calma a pesar de la amenaza, responde con firmeza:
Miss Heed: ¿De verdad crees que me asustas con eso, Nenenieve? La violencia no es la respuesta, y tú lo sabes. Pero si crees que puedes intimidarme, te equivocas. No voy a quedarme de brazos cruzados mientras sigues haciendo daño.
Nenenieve, aún con esa sonrisa burlona, comienza a perder la confianza.
Nenenieve: ¿Y qué piensas hacer? ¿Llamar a tus amigos para que te ayuden? No tienes idea de con quién te estás metiendo. Mis hombres son leales y no dudarán en actuar.
Miss Heed: Tal vez, pero también sé que la lealtad se compra y se vende. Y en el fondo, todos tienen un precio. No subestimes el poder de la verdad. La justicia siempre encuentra la manera de prevalecer.
Nenenieve, sintiendo que la situación se le escapa de las manos, intenta cambiar de táctica.
Nenenieve: Escucha, Miss Heed. Tal vez podríamos llegar a un acuerdo. No tienes que involucrar a la policía. Podemos resolver esto de otra manera.
Miss Heed, con una mirada desafiante, responde:
Miss Heed: ¿Y qué tipo de acuerdo propones? ¿Seguir con tus crímenes y dejar que la gente sufra? No, Nenenieve. No voy a ser cómplice de tus acciones. Es hora de que enfrentes las consecuencias de lo que has hecho.
Nenenieve, sintiendo la presión, se da cuenta de que su juego de intimidación no está funcionando.
Nenenieve: Muy bien, entonces. Pero recuerda, no soy alguien a quien se pueda ignorar tan fácilmente. Esto no ha terminado.
Miss Heed: No, Nenenieve. Esto apenas comienza. Y te aseguro que no me detendré hasta que la justicia se haga.
Ambos se miran fijamente, sabiendo que la confrontación entre ellos es solo el inicio de una batalla más grande.