Miss Heed se topa con King Alien.
Los extraterrestres la tienen atada y secuestrada. King Alien voltea y dice.
King Alien: No, no te voy a usar para hacer mis experimentos. Solo te advierto que borres todo relacionado a mí y a la existencia. Por que tú no sabes de lo que soy capaz de hacer. Incluso puedo eliminar la existencia misma y la galaxia entera a mi antojo.
Miss Heed: Y que pasa si no quiero?
King Alien con su puño, desaparece en un abrir y cerrar de ojos el celular de Miss Heed. Como si ese celular no hubiera nunca existido, eliminando rastro.
Miss Heed, sorprendida y asustada, siente un escalofrío recorrer su espalda. La amenaza de King Alien resuena en su mente mientras observa cómo el lugar a su alrededor parece temblar con la energía que emana de él.
Miss Heed: ¿Qué tipo de poder tienes? ¿Por qué querrías que borrara todo rastro de ti?
King Alien: (con una sonrisa siniestra) Mi poder es más allá de lo que tu mente humana puede comprender. He viajado a través de dimensiones y he visto el fin de mundos. No quiero que nadie se interponga en mis planes. Si no borras todo lo relacionado conmigo, podrías ser la causa de tu propia destrucción.
Miss Heed: (recuperando un poco de valor) No me dejaré intimidar. La verdad siempre encontrará la manera de salir a la luz, incluso si intentas borrarla.
King Alien: (frunciendo el ceño) Eres más valiente de lo que esperaba, pero eso no cambiará tu destino. (extiende su mano y un brillo oscuro comienza a formarse en su palma) Te daré una última oportunidad. Haz lo que te digo, o enfrentarás las consecuencias.
Miss Heed siente el aire volverse denso y pesado. La energía oscura que emana de King Alien parece absorber la luz a su alrededor. Sin embargo, en su interior, una chispa de determinación comienza a arder.
Miss Heed: (con firmeza) No puedo dejar que el miedo me controle. Si tienes tanto poder, ¿por qué necesitas que yo borre tu existencia? Tal vez, en el fondo, temes ser olvidado.
King Alien: (sorprendido) ¿Olvidado? ¡No! ¡Soy el rey de un imperio intergaláctico! No me subestimes, humana.
Miss Heed: (con una sonrisa desafiante) Entonces, ¿por qué no demuestras tu poder en lugar de amenazarme? Si realmente eres tan formidable, no deberías necesitar que yo haga nada.
King Alien, visiblemente irritado, aprieta su puño y la energía oscura se intensifica. Pero en lugar de atacar, se detiene, contemplando la audacia de Miss Heed.
King Alien: (con un tono más calmado) Tienes razón en una cosa. No necesito que me temas. Pero tampoco puedo permitir que tu obstinación me ponga en peligro.
Miss Heed: (con una mezcla de curiosidad y desafío) ¿Y si te ofrezco un trato? En lugar de borrar mi conocimiento sobre ti, ¿por qué no me cuentas más sobre tu imperio y tus verdaderas intenciones? Tal vez haya una forma de que ambos ganemos.
King Alien: (pensativo) Interesante propuesta. Pero recuerda, no soy alguien que se deja engañar fácilmente. Si decides traicionarme, no dudaré en deshacerme de ti.
Miss Heed: (asintiendo) Lo entiendo. Pero creo que hay más en ti de lo que dejas ver. Tal vez, solo tal vez, podamos encontrar un camino que no implique la destrucción.
King Alien: (con una leve sonrisa) Muy bien, humana. Hablemos. Pero ten cuidado con lo que deseas. La curiosidad puede ser un arma de doble filo.
Y así, en medio de la oscuridad, una inesperada alianza comienza a formarse, mientras el destino de ambos pende de un hilo.