A Evil Cody le preguntan que opina del papa francisco.
Cody: No lo odio, simplemente nunca me interesó lo que hacía, sobre su muerte... Digo, es como si dijera que está vivo o resucitó. La religión no me interesa en lo más mínimo, ósea no me importa lo que él hacía, solo yo lo que hago. Su muerte me da lo mismo. Solo yo y punto.
Evil Cody parece tener una perspectiva bastante nihilista y centrada en sí mismo. Su falta de interés en la religión y en figuras como el Papa Francisco refleja una desconexión con temas que son significativos para muchas personas. Al expresar que su muerte le da lo mismo, muestra una actitud de indiferencia hacia la vida y la muerte de otros, lo que puede ser visto como una forma de egoísmo o desdén por las creencias y valores de los demás. En resumen, su opinión es clara: no le importa lo que otros piensen o sientan, y se enfoca únicamente en su propia existencia y acciones.