La Chilindrina, Quico y el Chavo al ver que Terry no para de insistir con su celebración navideña.
Chilindrina sonríe a regañadientes: De acuerdo, iremos los 3. Pero no esperes una sonrisa.
Chavo rascándose la cabeza: Sí, quiero nada más comer! Pero nada más.
Quico con cara de pocos amigos: Si escuchamos villancicos, nos vamos, entendiste Terry?
Terry, emocionado, asiente con una gran sonrisa: ¡Claro que sí! ¡Habrá comida deliciosa y muchas sorpresas!
La Chilindrina, cruzando los brazos: Bueno, pero que no se te ocurra poner esos villancicos aburridos.
Chavo, con los ojos brillantes: ¡Sí! ¡Comida! ¡Eso es lo que importa!
Quico, frunciendo el ceño: Y si hay villancicos, ¡mejor que sean los buenos!
Terry, tratando de calmar los ánimos: No se preocupen, prometo que será una celebración divertida. ¡Habrá juegos y todo!
La Chilindrina, con un leve suspiro: Está bien, pero no prometo no quejarme.
Chavo, saltando de emoción: ¡Yo solo quiero comer!
Quico, aún con cara de pocos amigos: Y yo quiero que todo salga bien.
Terry, sonriendo: ¡Perfecto! Entonces, ¡nos vemos en la celebración!
Los tres se miran, un poco escépticos, pero al final, una pequeña chispa de emoción comienza a brillar en sus ojos.