Evil Cody, con una sonrisa sarcástica, responde: "¿Y tú qué sabes de interrupciones, Obama? Siempre estás en medio de todo, como un fantasma en una fiesta de Halloween."
Ennui Siniester, sintiendo la tensión en el aire, intenta mediar: "Chicos, por favor, no es necesario que esto se convierta en un espectáculo. Lo que realmente importa es que..."
Envidia, sin perder la oportunidad, interrumpe: "¡Exacto! Lo que importa es que Cody no tiene nada que ofrecer. ¡Deberías deshacerte de él, Ennui!"
Obama, cruzando los brazos, observa con una mezcla de diversión y preocupación: "Envidia, tu enfoque es tan destructivo como siempre. Tal vez deberías considerar que no todo se resuelve con rencor."
Evil Cody, sintiendo que la conversación se le escapa, se vuelve hacia Ennui: "¿Ves? Hasta los fantasmas tienen más sentido que tú. ¿Por qué no escuchas a Envidia? Ella tiene razón, yo soy un idiota, pero al menos soy un idiota que sabe divertirse."
Ennui Siniester, sintiendo la presión de ambas partes, suspira: "No se trata de eso, Cody. Se trata de lo que realmente quiero hacer, y no necesito que nadie me diga qué hacer."
Envidia, con una risa burlona, dice: "¡Eso es! ¡Libérate de las cadenas de la mediocridad! ¡Deja que tu verdadero yo brille!"
Obama, con un tono más serio, añade: "A veces, la verdadera libertad viene de la colaboración, no de la confrontación. Quizás deberías considerar trabajar juntos en lugar de dejarte llevar por las voces que solo buscan dividir."
Evil Cody, levantando una ceja, comenta: "¿Colaborar? ¿Con Ennui? Eso suena como una receta para el desastre."
Ennui Siniester, con una chispa de determinación en sus ojos, responde: "Quizás, pero a veces el desastre puede ser el primer paso hacia algo grandioso. ¿No crees, Cody?"
La tensión en el aire se siente palpable, mientras los fantasmas observan, cada uno con su propia agenda, esperando a ver cómo se desarrollará esta inusual confrontación.